Quién es Luis Cebrian:

Un día de mayo del 48, después de estar nueve meses en la oscuridad decidí salir de cueva, para empezar a dar guerra en Atea, Iba desnudo, llorando y con las manos cerradas, ya empezaba desde el primer día de mi nacimiento a ser un poco CATALAN, era el hijo tercero de la familia Cebrián – Guerrero. Lo que no he averiguado todavía si fue intención de mis padres, en aumentar la familia, o bien el patinazo de una noche larga, oscura sin televisión en que la señora Belén Esteban no estaba en pantalla,
Con el fallecimiento de mi progenitor, Rafael Cebrián Marco, de profesión, Sastre, y que también, tuvo en sus manos a muchas cabezas y pescuezos de los hombres de Atea
Pues en su casa materna su padre, mi abuelo, también de nombre como un servidor era barbero y rapaba cabezas, y cabezones.- Mi padre también ayudaba en este oficio, de hecho, en mis veranos en Atea también me llamaban como el hijo del Barbero, y por parte de la familia de mi madre teníamos el renombre del CAL CORETE, Mi padre fue durante una época alcalde de Atea, y entre su mandato entre otras cosas, puso el reloj en la torre de la iglesia, y también creo que tuvo parte en la conducción del agua de la Fuente Nueva. (Eso sí, con las perras gordas del pueblo)
Como tantas otras familias, mi madre y mis hermanos tuvimos que coger nuestro avión particular, y buscar nuevos horizontes dorados, aterrizando en Valls, donde vivía su hermana Elisa, o sea mi tía, y en estas ricas tierras en que los muebles, son avellaneros, cepas y almendros, y algún que otro alcornoque. También mucha industria, que daba oportunidad en buscar trabajo.
Me escolaricé entre catalanes, bajo la dictadura del “SISQUET” (Francisco Franco) El espíritu nacional, la Religión, siempre estaba presente.- el Ebro nace en Fontíbre, Castilla la nueva y Castilla la vieja. El Alcázar de Toledo, que cuando entraron los nacionales, el General Moscardó dijo sin novedad mi General, y estaban todos muertos, Colon descubrió las Américas, y luego ha resultado que viajes Ecuador ya tenía una agencia en estos lugares, así era entonces la enseñanza.
A los 14 años salí del colegio y hice el (Máster) en la calle o sea que ha base de bofetadas aprendí el oficio de Pintor de brocha, oficio que aun sigo “castigado” de cara a la pared y munchas veces de rodillas.

A lo largo de muchos años, aunque pasara veranos escolares en Atea, la verdad es que he crecido de espaldas, a mis orígenes, en Valls siempre llevo una vida dentro del mundillo de la pintura, escuela de arte nocturnas, exposiciones, de pintura colectiva, colaboro con una revista local en dibujos y caricaturas, me han publicado un libro titulado “Cien fuentes y lavaderos” y algún trabajillo mas, etc. En un nivel de aficionado y dominguero.
Pero un día se me encendió una bombilla en mi cabeza, grande y ya despoblada, y que me peino con una raya enorme, que es como una pista de aterrizaje para las moscas, que me dijo colaboras, en temas de Valls, y en cambio en el pueblo donde la cigüeña un día te dejo caer cansada de llevar tanto peso, nada de nada.
Así fue como empecé a contactar con un tal Roberto que me abrió un hueco en la web de Atea, y que él no sabe lo ha gusto que me lo paso explicando cosas, cosillas de la vida cotidiana de Atea, en los años 1955 – 60, “entonces sí que me peinaba”