Nacido en Atea y maestro de profesión, Santiago Hernández Ruiz dedicó toda su vida a la enseñanza. Sus trabajos pedagógicos le han otorgado un lugar destacado en la historia de la educación española del siglo XX.

Estudió Magisterio en Zaragoza y, tras una corta estancia en Madrid, tomó posesión de su plaza de maestro en Paniza, donde ejerció desde 1925 hasta 1930. Fueron apenas cinco años, pero aquí se forjaron los fundamentos de su pensamiento pedagógico.

Posteriormente, prosiguió su carrera en Madrid y en Teruel. Su colaboración en el último Ministerio de Instrucción Pública de la II República le obligó a exiliarse al finalizar la Guerra Civil. Comenzó un largo, pero productivo, exilio en México, donde participó en las más importantes iniciativas pedagógicas de los exiliados españoles. Trabajó, además, para la UNESCO durante diez años en un proyecto destinado al desarrollo de la educación en toda Hispanoamérica. A partir de 1967, de nuevo en México, ocupó varias cátedras, hasta su jubilación, en la Universidad Nacional Autónoma.

Su obra es extensa y diversa, y resulta curioso saber que, por su calidad, algunos de
sus libros se siguieron editando en España durante los años de la dictadura franquista,
aunque sin que apareciese su nombre, debido a su condición de republicano exiliado.
También colaboró desde muy joven en la prensa, tanto en periódicos como

La Voz de Aragón como en publicaciones especializadas: El Magisterio de Aragón,
La Educación o El Magisterio Nacional. Antologías literarias aplicadas a la escuela,
ensayos eruditos, libros de pedagogía, organización escolar, metodologías... son el legado
de una dilatada vida dedicada en cuerpo y alma a su profesión.

 

Texto extraido literalmente del libro:"Comarca del campo de Daroca" de Fabian Mañas Ballestin.
Fotografia de Roberto Tornos

Enlaces relacionados con Santiago hernandez:

SANTIAGO HERNÁNDEZ RUIZ (Atea, 1901.Valderrobles 1988)
Calle Las Bodegas ( Atea)