“
Al baile de la víspera solo nos dejaban entrar a las mozas que íbamos acompañadas y después de éste iban los mozos a rondar a las mozas a cantarles coplas…” recuerda Marisol Gracia.
En la actualidad, la fiesta de Santa Cruz se ha trasladado en el calendario al tercer Sábado de Mayo, para juntarla con la Fiesta de
Nª Señora la Virgen de los Mártires, Patrona de Atea, que antaño se celebraba el 13 de Mayo y ahora lo hace el tercer Domingo de Mayo.
La festividad comienza el viernes anterior a mediodía, con volteo de campanas y pasacalles amenizado por banda de música; por la tarde, Misa de Difuntos en la Parroquia. El Sábado, se celebra la fiesta de Santa Cruz. Por la mañana, en romería todo el pueblo sube a la ermita de San Lamberto y se oficia la Santa Misa. Posteriormente se sube al cerro de Santa Elena (cerro de Santa Cruz). A medio camino se descansa en la llamada: “Piedra del Refresco” y allí se prueban ricos manjares de la tierra (huevos, torta, vino…) Al llegar a la cumbre, el sacerdote oficiante bendice los términos. De regreso al
parque de San Lamberto, las familias y grupos de amigos preparan la comida, comen y descansan, todo ello amenizado por la banda de música. Por la tarde, desde la Cooperativa se baja en Procesión hasta la iglesia cantando las Aleluyas y
cantos de Santa Elena. Ya en la parroquia, hombres y mujeres adoran la “Reliquia”, se reza el Rosario y de nuevo de da la vuelta al pueblo en procesión bailando el Bolero.
Bajada de Santa Cruz,3 Mayo 1956, con los ramos a la altura de El Cantadero Fotografía cedida por Saul Herrero